- Debes visitar Nora, donde se encuentran unas ruinas romanas, y a al mismo tiempo, puedes disfrutar de unas maravillosas vistas al mar.
- Visitar el golfo de Orosei, y descubre su naturaleza salvaje en la Cala Goloritzé, plaga de cuevas por explorar.
- Codéate con la jet set en Porto Cervo, el lugar más lujoso de la isla, donde junto a las playas puedes ver los beach clubs con los restaurantes flotantes o campos de golf con vistas al mar. Aunque una vez allí puedes pasar de tanto lujo y puedes adentrarte para explorar las riquezas naturales como la Playa del Peyero, rodeada de dunas y vegetación o la Playa del Príncipe, que está dividida en dos pequeñas calas.
- No puedes irte de Cerdeña sin visitar Alguero. Es cómo transportarse a una ciudad medieval española. E incluso puedes escuchar a sus lugareños hablando catalán.
- Tampoco puedes abandonar la isla sin probar y disfrutar de su gastronomía, y uno de sus fuertes, los quesos. Y es que la ganadería ovina y cabruna son la principal actividad económica.